Con profundo dolor y consternación, familiares, amigos, docentes y vecinos dieron el último adiós el adolescente de 14 años que el pasado jueves fue hallado sin vida en su vivienda, ubicada en el sector Los Pinos, tras quitarse la vida. El sepelio se realizó la tarde del sábado en el cementerio Virgen de los Remedios, donde un nutrido cortejo fúnebre acompañó los restos del joven en una despedida marcada por el llanto, los abrazos solidarios y los gestos de incredulidad ante la tragedia.
Entre los asistentes se encontraban compañeros de la I.E. N° 0094 Shilcayo, profesores y allegados, quienes expresaron su pesar y acompañaron a la familia en este difícil momento. Lloiner Saboya Bocanegra, padre del menor, asumió públicamente su responsabilidad, visiblemente afectado: «No supe ver su sufrimiento«, dijo entre sollozos, al tiempo que agradecía el respaldo de la comunidad.
Por su parte, uno de los profesores del adolescente destacó sus cualidades académicas y su potencial, haciendo un llamado a los padres de familia: «Dialoguen más con sus hijos para evitar futuras tragedias«, exhortó. Un tío del menor también compartió su dolor: «No entendemos que lo llevó a esto, pero siempre será mi sobrino favorito«, expresó. Mientras que una prima, conmovida, agradeció la solidaridad de quienes acompañaron la despedida.
El caso ha generado gran conmoción en la localidad, impulsando a líderes comunales y autoridades educativas a reflexionar sobre la importancia de la salud mental en la adolescencia y a promover espacios de diálogo en las familias. Hoy, los restos del menor, descansan en el camposanto bandino, mientras su comunidad intenta asimilar una pérdida que deja una huella imborrable.