Morales se ha convertido hace muchos años en el distrito de la diversión, no sólo por la presencia de las discotecas, también de recreos turísticos, restaurantes y negocios hasta donde acude la población masivamente. Sin embargo, la falta de regulación provoca serios problemas, sobre todo los ruidos molestos que producen las discotecas.
Eliborio López Linares, vecino de la discoteca Anaconda, señaló que la situación rebasa la tolerancia por lo que han acudido al Poder Judicial. Las empresas tienen derecho de trabajar, pero no pisoteando el derecho de los demás.
Aseguró que no existe principio de autoridad en el distrito, a las anteriores gestiones municipales no les ha importado nada poner orden. Ahora está a la espera de la respuesta del Poder Judicial.
El también docente, dijo que los últimos meses ha sido un caos porque inclusive utilizan la parte exterior de la discoteca y el ruido es estruendoso. Eliborio López solicitó al nuevo alcalde Rufino Pinedo Meléndez, tomar acciones y hacer respetar el derecho de tranquilidad que su pueblo necesita.
Finalmente, dijo que las autoridades tienen que cumplir sus funciones y esa pequeña alita que alguien recibe de las discotecas, no exista en esta gestión.
