El regidor de la municipalidad distrital de Morales, Max Lozano, expresó su total disconformidad frente a la decisión de cerrar el terminal terrestre, medida que, según indicó, no fue consensuada ni con el concejo municipal ni con los más de 30 usuarios que actualmente operan en el lugar.
Lozano sostuvo que la disposición municipal es unilateral y carece de un acuerdo de consejo, por lo que la calificó de irregular. Asimismo, señaló que el terminal terrestre genera ingresos importantes que superan los 36 mil soles mensuales, además de un flujo económico diario por los servicios, por lo que no encuentra justificación en dejar de lado mejoras y optar por el cierre.
El regidor detalló que las observaciones técnicas realizadas por Defensa Civil son subsanables, como la falta de un plan de contingencia general, responsabilidad que recae en la municipalidad. En esa línea, recalcó que cada empresa de transporte ya cuenta con su propio plan de seguridad.
Por otro lado, Lozano dejó entrever que el cierre beneficiaría a un empresario privado, pese a que el espacio al que se pretende trasladar las operaciones sería reducido e insuficiente para albergar a las más de 30 empresas de transporte interprovincial. Finalmente, advirtió que esta decisión no solo afectará a transportistas, sino también a mototaxistas, comerciantes, cargadores y vecinos que dependen económicamente de la actividad en torno al terminal.
