Uno de los patrimonios naturales con el que Tarapoto aún cuenta, es el ojo de agua “El Fondero”, una de las pocas vertientes que se ubica casi en el centro de la ciudad, entre la Av. Circunvalación y Prolog. Alerta. El agua fresca y limpia que emana, es utilizada por la población que diariamente llega al lugar ante el desabastecimiento de agua potable que estamos viviendo.
Los pobladores llegan con sus envases desde zonas alejadas de Tarapoto, Morales, Banda de Shilcayo para juntar el líquido elemento. El fenómeno niño global ha puesto entre la espada y la pared a las autoridades, la falta de lluvias ha disminuido considerablemente la producción de agua en las vertientes lo que conlleva a la escasez.
Los vecinos de la asociación Cordillera Azul, dijeron que acuden diariamente al ojo de agua por las mañanas, mediodía y tarde. Tiene una vertiente en su zona, pero no es suficiente para abastecer a más de 400 familias que habitan en el lugar.
Segundo Roger Utia Ramírez, dijo que una de las fuentes naturales que les ayuda en este tipo de situación, si no estuviera bien cuidada, sería terrible abastecerse del agua que tanto se necesita.
Jhon Miller Piña, otro poblador que llegó desde Cordillera Azul para acarrear su agua, indicó que la sequía está causando desabastecimiento, en su zona no hay el servicio. Hizo un llamado a todas las familias que hacen uso de esta vertiente, colaborar para que se mantenga limpia.
Un poblador que vive por la zona hace más de 37 años, refirió que la cantidad de agua que discurre en la actualidad ha disminuido en un 30%, cuando llegó a vivir por el lugar, era un chorro con bastante fuerza. Manifestó que alguna vez le dijeron que “El Fondero” sería indispensable para la población y ahora se hace realidad.
