Este viernes por la tarde, falleció en el hospital EsSalud de Tarapoto, Luis Fernando Dávila Castañeda, administrador del hotel «Boca ratón», quien terminó con muerte cerebral tras una operación de rinoplastia practicada por el cirujano plástico Carlos Larios Villasis.
Según conocidos del joven profesional, buscó los servicios de Larios Villasis debido a problemas en la nariz, tenía desviación del tabique que le ocasionaba serios problemas para respirar, sobre todo para conciliar sueño.
Es así que, la intervención se realizó en una clínica local, donde el médico, alquiló la sala de operaciones y otros ambientes para que su paciente se recupere. Sin embargo, tras los problemas post operatorios, sus amigos, exigieron su trasladado al nosocomio de los asegurados donde le realizaron los exámenes correspondientes para conocer su situación. Una placa de radiografía, mostró la existencia de un extraño objeto que habría sido dejado en el área intervenida.
Amigos de Dávila Castañeda, denunciaron el mismo jueves, que se habría cometido negligencia médica, la operación debía durar un par de horas y se extendió más de 6. Edwin Puerta Castañeda, amigo de Luis Fernando, detalló lo que sucedió.
Por su parte, Edwin Puerta Valdez, gerente del hotel donde laborada la víctima, manifestó que procederán a realizar una denuncia penal en contra del médico responsable, esperaban la llegada de los familiares de su trabajador y amigo para proceder.
El caso se encuentra en manos de la Divincri de Tarapoto y el Ministerio Público, los mismos realizaron las diligencias correspondientes para las investigaciones del caso y dar con el paradero del médico quien atendió al paciente.
No es la primera vez que el médico cirujano plástico se ve involucrado en un hecho de este tipo, hace algunos años, realizó una intervención quirúrgica a Flor Rudecinda Gonzales Trigozo quien fue sometida en la Clínica San Camilo a una operación, tras la misma, falleció en apariencia debido a un shock hipovolémico.