Una menor de 14 años fue intervenida de emergencia en el Hospital II-2 de Tarapoto tras ingresar con fuertes dolores abdominales. Gracias a la rápida actuación del equipo médico, se logró extirparle un teratoma ovárico gigante, un tumor benigno de aproximadamente un kilo y de 25 x 30 centímetros, que ponía en riesgo su vida.
El médico cirujano pediatra Efraín Salazar Tito detalló que, tras una tomografía computarizada (TC) multicorte, se identificó una masa quística de gran tamaño cuya naturaleza debía determinarse. Ya en sala de operaciones, se confirmó que se trataba de un teratoma ovárico, un tumor de células germinales que puede contener estructuras como cabello, dientes o hueso.
“El tumor estaba siendo irrigado por un pedículo, estructura que lo conecta con arterias, venas y nervios, el cual se había torcido tres veces, lo que causaba el dolor agudo en la paciente”, explicó el especialista.
De no haberse realizado la intervención quirúrgica a tiempo, el quiste podría haber colapsado, generando hemorragia interna, peritonitis e incluso la muerte. Afortunadamente, la operación fue exitosa y la adolescente se encuentra en recuperación, sin complicaciones, con buena tolerancia a la alimentación y sin la sensación de peso abdominal que antes la aquejaba.
Teresa Pinchi Tenazoa, tía de la adolescente dijo que viven en Lima hace muchos años y se trasladaron a Caspizapa por tema familiares y fue ahí donde empezaron los dolores extremos. El Dr. Salazar exhortó a los padres a no minimizar los dolores abdominales en menores y acudir de inmediato a un centro médico para descartar complicaciones mayores.
