Los restos mortales de Luis Fernando Dávila Castañeda, quien se desenvolvió como administrador de hotel Boca Ratón en Tarapoto durante 10 años y quien murió tras una operación de cirugía plástica, fueron trasladados a su tierra natal Chachapoyas para recibir el último adiós.
Dávila Castañeda (44), falleció el viernes pasado en el hospital de EsSalud de Tarapoto tras una aparente mala práctica médica realizada por el médico Carlos Larios Villasis. Fue sometido a una cirugía de rinoplastia debido a problemas que padecía en el tabique, la misma condujo una muerte cerebral y su posterior fallecimiento.
Un examen de radiografía, mostró en la existencia de un objeto dentro del área de intervención quirúrgica, hecho que podría explicar su fallecimiento y que las investigaciones del Ministerio Público lo determinará.
El cuerpo del ciudadano, fue velado el fin de semana por algunas horas en las instalaciones del hotel donde sus amigos y compañeros le rindieron homenaje. El domingo en horas de la mañana, su familia, lo trasladó a su tierra natal.
Edwin Puerta Castañeda, amigo y quien consideró a Luis Fernando como parte de su familia, manifestó que se realizó una operación de rinoplastia no por vanidad, si no por problemas de respiración y el oído.
Puerta Castañeda, exigió justicia y que las autoridades del Ministerio Público y policía den con el paradero del médico para que pague con cárcel, porque este caso no debe quedar impune, resaltó.
Por su parte, Alberto Gutiérrez Castañeda, hermano de la víctima, agradeció a la familia Puerta Valdez, por acogerlo en su empresa, por darle aprecio y cariño. Los restos del administrador, fueron despedidos para ser llevado con destino a Chachapoyas para su cristiana sepultura. La familia y amigos indicaron que estarán siempre atentos y seguirán el caso para que no quede impune.