Con un método fuera de lo común, los pobladores de la Comunidad Nativa «Aerija» en la Provincia de Atalaya, castigan a las personas de mal vivir. La planta que usan para castigarlos es la ortiga o ishanga, toda la población participa y se unen para dar un escarmiento a la delincuencia que pululan en este lugar.
Ante la inacción de las autoridades y la creciente inseguridad ciudadana la población de la comunidad nativa de Aeirja tomó la justicia con sus propias manos. El pasado fin de semana capturaron a tres jóvenes, los que presuntamente se encontraban consumiendo drogas en las inmediaciones del poblado. La población, cansada de estas personas de mal vivir, decidió darles un escarmiento con ramas de Ishanga (las cuales causan gran ardor y picazón) como una forma de amedrentar y evitar que estos personajes sigan recurriendo a este tranquilo poblado. Los jóvenes pidieron perdón pero no les hicieron caso.
